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Collao Jermoso -Parte IIIº- (Macizo Central)* Apéndice: Coordenadas GPS |
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 Cumplida la visita a la necrópolis, retomamos la pista. Apenas unos pasos (una distancia de una finca) nos separan del Puente de Barrejo (foto miniatura), sobrevolando el curso del Cares.
El río Cares (foto ampliación) marca la línea divisoria entre los Macizos Central (o de Los Urrieles) y Occidental (o del Cornión). Saltamos a la margen izquierda del río, en los últimos suspiros del Macizo de las Peñas Santas.
Un aspa de dirección equivocada nos saluda al otro lado del puente. Entramos en otro de los PR del Parque Nacional.
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 Quizá el saludo menos amable nos lo hace el Macizo de las Peñas Santas. Un rampa sin aliento remonta rápida desde el fondo del río.
Finalizada la rampa, tropezamos con el PR. No nos sirve de indicación, pues ambos ramales tienen rayas de continuidad.
He descrito la ruta desde Cordiñanes, pero la opción de descenso por el Puente Barrejo, también es válida para el ascenso. En caso de querer evitar La Rienda, había una zona de aparcamiento en la Fuente de Tejaoscura (no potable), en la otra margen de la carretera, donde se ubicaba la caseta de información del Parque (que todavía se conserva en las fotos aéreas del Sigpac).
Si tuviéramos el vehículo en Tejaoscura, seguiríamos la pista principal a la derecha. Suavemente muere en la carretera de Caín, unos metros más arriba de la antigua caseta (hoy emplazada en el Chorco de Los Lobos, carretera abajo).
No obstante, como nuestra primera idea era ir a Cordiñanes, tiramos a la izquierda, subiendo por el camino antiguo.
Foto miniatura: Unos pintan cruces, otros pintan senderos.
Foto ampliación: Camino antiguo, paralelo a la carretera de Caín. Las manchas de la foto no son más que cintas colgadas en el tendido eléctrico para evitar el choque de las aves con los cables eléctricos.
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 Nos damos cuenta de la altura perdida respecto de Cordiñanes. Empezamos a echar de menos no haber bajado por La Rienda. Éste es el principal problema del camino del ganado, la pérdida de altura para evitar los vacíos de La Rienda.
El sendero está señalizado con las marcas del PR, pero apenas tendríamos problemas de pérdida, ni siquiera en un falso desvío del camino.
En la parte final de la subida, la carretera corta el camino (foto miniatura). Podemos seguirla, o continuar por el camino, dejando el alfalto para los ciclistas (que aquí sufren los desproporcionados desniveles de la carretera).
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El PR enlaza Posada de Valdeón con la zona asturiana de Poncebos, siguiendo la afamada ruta del Cares.
El tramo de Posada a Caín, alterna camino y carretera. En términos generales puedo afirmar que el PR evita la carretera en la primera parte, y se desentiende del camino en la segunda.
A la vera de la carretera queda la Posa La Santa, donde descansa la Virgen de Corona en la procesión del 8 de Septiembre (este pequeño apoyo llega a verse a unos metros de la foto miniatura, en la curva inferior de la carretera). Otro de los atractivos de la carretera está en el llamado Chorco de Los Lobos. Está pasado el desvío a la ermita de Corona.
En este desvío el PR ya pasa definitivamente a la carretera. Deja el camino que pasa por al ermita y que retorna a la carretera en el Puente Santiján (en la Hoz del Cares). También evita el PR el sendero por los Prados de Castro, que enlaza con el camino que sube a la Canal de Moeño.
Ya lo dijo el poeta:
´Caminante son tus huellas
el camino nada más;
caminante no hay camino
se hace camino al andar.´
Nunca comprenderemos que no pueden pintarse ´estelas sobre el mar´.
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 El camino va alto sobre la carretera. En los últimos esfuerzos, vemos un rebeco, sobre un pedestal, mirando impasible hacia la Cordillera Cantábrica (foto miniatura).
El camino vuelve a la carretera, estamos en el Mirador del Tombo.
Las nubes se han apoderado del Central. Se nos resiste una última ojeada al lugar de nuestros sueños. Tendremos que conformarnos con la silueta grabada en cobre, que representa las cimas que se ocultan sobre las nubes (foto ampliación).
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 Tenemos Cordiñanes al alcance de la mano, pero la carretera se empeña en complicarnos la vida.
¿Dónde va? ¿Sube directa a Posada de Valdeón sin pasar por Cordiñanes? El camino del Bustio sí, siguiendo las marcas del PR.
La explicación de la carretera en más sencilla. En este caso, vale más una imagen que mil palabras (foto ampliación).
En la miniatura podemos apreciar, con esfuerzo, el puente de la carretera, río arriba. Nosotros atajamos por la vieja pista, que sale de la revuelta de carretera pasado el mirador.
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 De nuevo cruzamos la carretera. Parece una serpiente buscando los resquicios del terreno. Un atajo final evita otra revuelta de la empinada carretera. Los cansados pasos tocan a su fin. Descargamos las mochilas, pues hemos completado el doble circuito.
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He hecho referencia (en la página dedicada a la Vega de Liordes) a la senda del Mercadillo. Se trata de una bajada, bastante larga, pero sencilla, de Collao Jermoso a Posada de Valdeón.
Este circuito, también es factible con un único vehículo. En Posada de Valdeón cogeríamos el Camino del Bustio, por la vertiente izquierda del río Cares. Baja a la carretera de Caín a unos 300 m. del Mirador del Tombo. Ya ´sólo´ nos queda optar por la ruta de La Rienda o por el más largo camino de Barrejo; o entre ir a Collao Jermoso o quedarse en la Vega de Liordes.
El descenso a Posada se hará por las faldas de las Peñas Cifuentes, paso de Valdeón a Liébana por el Caben de Remoña (Senda del Mercadillo).
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