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Cueto Medio (Macizo Central)* Apéndice: coordenadas GPS |
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 Alcanzados los invernales superiores, ha de buscarse el camino que lleva al Collao Vernil. Con un poco de atención es fácil divisar el cueto del mismo nombre, que da forma al collado.
El Cueto Vernil es un peñasco calcáreo que sobresale a duras penas de la mancha boscosa que lo recubre por su vertiente norte. Se encuentra al Sudoeste, dirección algo menos definida en esta parte alta de Vierru.
Delante del cueto, y en los lindes del bosque, quiere apreciarse una pequeña cuesta de pradería recubierta de piedras, es el lecho de una -por lo general- seca reguera. Por esta cuesta entra el sendero que pasa al Collao Vernil.
Dos son los caminos que nos permiten subir al referido collado. El más evidente, entra entre las murias de las praderías de Vierru y la finca aislada del invernal superior. El camino, empedrado en ocasiones, sigue al Collao Parga. Debe dejarse cuando ceden las murias de las praderías de Vierru, que lo vienen delimitando por la derecha. En este momento, antes de que el reseco regón por el que hay que entrar al Collao Vernil corte el enconchado del camino, debe abandonarse éste, para remotar directos por la cuesta de la izquierda, a enlazar con un sendero de tierra que cruza hacia el, ahora oculto, Collao Vernil.
La cuenye de paso al collado, que sigue el lecho de la riega, es reconocible por un bidón azul para recoger el agua.
El otro de los caminos que llevan al Collao Vernil, apenas un sendero de tierra, discurre paralelo al anterior, pero a mayor altura.
Para coger éste, ha de remontarse hasta el último invernal. Entrando por el pasillo que se forma entre la muria de su pradería y la peña (foto miniatura, con el Cueto Vernil al fondo) empieza a dibujarse su trazado.
Al final de la muria, el sendero se desdibuja ligeramente entre un breve tramo de canchal y arbolado. Basta mantener la dirección, hasta que se entra en la abierta pradería que, atravesada en sentido ascendente, finaliza en el reseco cauce de la riega donde encontramos el bidón antes apuntado.
Subiendo entre las pulidas piedras del reguero, se entra en la boscosa cuenye que da paso al Collao Vernil (foto ampliación).
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 Al otro lado de la cuenye boscosa se entra en una vaguada que sube directa al Collao Vernil. El sendero se sale hacia la izquierda, pero puede seguirse por la breve vaguada, donde los retoños del bosque apenas incordian la leve subida.
En el collado se ha construido un bebedero cuyo caudal no ofrece garantías de continuidad.
Echando la vista atrás destaca la Cabeza La Rasa; aunque son las estribaciones del Cornión, concretamente el Cabezo Llorosos y el Alto la Peña (o Cuetón de Llorosos), las dos moles que más llaman la atención en este punto de la ascensión (fotos miniatura y ampliación).
No ha de devolarse el Collao Bernil, sino que el sendero sale a contramano de la vaguada que se acaba de ascender, cortando la Cuesta les Cuerres hacia el Sudeste, en dirección al monte del mismo nombre (foto miniatura).
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 El sendero pronto se interna en el hayedo. En las primeras revueltas, que contrastan con el trazado predominantemente lineal del sendero, se oculta la Fuente Cuerres. La pasada primavera ya ha dado muestras de agotamiento. En los bosques se pierde la referencia del terreno. Baste apuntar que, si desde Vierru al Collao Bernil se ha trazado un diagonal hacia el Sudoeste, en este tramo de bosque se estaría trazando otra diagonal hacia el Sudeste, con un vértice en el mencionado collado y otro en el inicio de la abierta y vasta vaguada que remonta hasta el Collao Cuerres.
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 Confiados en el trazado del sendero alcanzamos el arranque de la ya referida vaguada que culmina en el Collao Cuerres. La cóncava cuesta asciende libre de bosque, apenas tamizada de matorral y avanzadillas del hayedo. El sendero se sale, en los primeros compases de la evidente subida, a mano izquierda de la vaguada, reinternándose en un monte algo menos frondoso, donde seguimos disfrutando de la vista del Cabezo Llerosos (foto miniatura) y de las sobrecogedoras estribaciones de Portudera, con las cortadas calizas del Ariscu y del Cabezu Sonllanu (foto ampliación)
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 El sendero se reconduce por una cuesta delimitada por el corte de Maín que mira a los Puertos de Era, en un último repecho hasta coronar una collada. La continuación del sendero sigue un esquema similar al apuntado en el Collao Bernil, pero a la inversa. Sin devolar la collada, se sale en diagonal con tendencia al Sudoeste. Mas si nos asomamos a la collada puede verse una de las cabañas de la majada de Trisgüerda (foto miniatura).
La majada tiene entrada desde otra de las majadas de Maín, Dobros; en tanto que es puerta de paso a la Cabeza la Rasa, si no se quiere afrontar la tremenda acanaladura que vierte a Vierru.
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 El sendero faldea a media altura, hasta confluir con la abierta vaguada de la Cuesta Cuerres a la altura de la collada del mismo nombre.
La foto ampliada está tomada en uno de los solitarios árboles que se desperdigan al final de la travesía, desde el que se distinguen los lindes del hayedo y de la cuesta. El sendero procedente del Collao Bernil entraría por la parte baja del hayedo, a esta cuesta de resecos retoños de hayedo.
El conjunto de Llerosos aparece desgajado de las tres cimeras del Ariscu Sonllanu (Portudera) por un brazo del mar de nubes que se cuela por las aberturas del Cares. El Cares es aquí divisoria de macizos (Llerosos se eleva en las estribaciones del Occidental, y Portudera en las del Oriental), en tanto que el Duje separa Maín (Macizo Central) de Portudera (Oriental).
Devolando el Collao Cuerres se entra en la estrecha angostura por la que se baja al jou del mismo nombre (foto miniatura).
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