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Cruz de Priena (Macizo Occidental)*. Apéndice: coordenadas GPS |
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 Al igual que en el ascenso, nos colamos por la pista entre dos invernales, saliendo a la vasta collada donde se dobla hacia Teleña. A mano izquierda salen dos pistas: una cegada que sale en perpendicular a la pista troncal, y otra que sigue directa al monte de enfrente. Se sigue por ésta. A medida que se desciende por ella, se va adivinando un ramal secundario que se tira a la izquierda, en dirección a una ceñida valleja boscosa. A nuestra espalda va quedando la mole de Priena (foto ampliación). En el cruce la señalización nos invita a tirarnos hacia la referida valleja, dejando la pista de la parcelaria que sube por las praderías del monte adyacente.
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 La pista de la parcelaria muere en un rellano a las puertas de la valleja. Degenera en un camino carretero que entra en la umbría del boscaje. No presenta cruces conflictivos, apenas un camino que sale a mano izquierda a un invernal escondido en el bosque. Si bien ese ramal lateral pudo estar frecuentado en el pasado, así lo parece indicar la amplitud de su caja, va deapareciendo entre la cuesta, hasta acabar convertido en una difudsa vereda de cabras.
El camino que baja a Cueto Abamia sigue un trazado ondulante por un apartado rincón de cabezos, praderías, montes y vallejas (foto miniatura). Pronto vagirando, faldeando sobre una pindia pradería que quiere dar vista a la zona de Isongo. Se interna de nuevo en el bosque para salir al otro lado a las suaves erías de Cueto Abamia, que dan vista al ya ansiado Corao (foto ampliación).
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 La pista gira junto a una cabaña (foto miniatura), entrando en la umbría de los taludes que argayan sobre Cueto Abamia (foto ampliación).
Saliendo del primer bloque de casas del pueblo, se llega a la casa blanca donde convergemos con la ruta de ascenso.
Otra opción de acortar ligeramente la ruta o, al menos, librarnos de unos kilómetros de asfalto es llegar en coche hasta Cueto Abamia. Lo que no es obstáculo para prescindir de la parte cultural del recorrido por las casonas de Corao y por la iglesia de Abamia.
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