usuario:   clave: entrar    alta
  buscar   PORTADA  
PORTADA
FOTOGRAFIA AEREA
RUTAS POR LOS PICOS DE EUROPA
RUTAS TURÍSTICAS
PAISAJE
ALOJAMIENTOS
TABLÓN INFOJOVEN
ASOCIACIONES
MÚSICA
ARTES PLÁSTICAS
TEATRO
SEMANA SANTA
DEPORTES
ENLACES
INMOBILIARIA GESIMA
COMPRA - VENTA
COLUNGA
NAVA
CECEDA
CORREO WEB @RODILES.COM
AVISO LEGAL
TRIVIAL DE VILLAVICIOSA
Google


Rutas por los Picos de Europa

Imágenes de una vida en la montaña (VII)

<< anterior  22 de 25  siguiente >>


El hombre ha regresado a la comodidad de sus valles, retornando la vida a la montaña. Los sonidos naturales rasgan el silencio del Cornión ante la penumbra de la noche. Cedemos ante el cansancio, pero escapamos antes de que el ruido de los motores irrumpa otro día más, con el nuevo amanecer, desde las profundidades del valle.
  Una primera noche bajo un techo de nebulosas y estrellas fugaces nos ha hecho comprender que la llamada de la montaña está en su intrínseca esencia, y que se apaga y queda sin sentido cuando se trata de adulterar adaptando la naturaleza a las carencias de una sociedad cada vez más sedentaria y acomodada. En la aceptación de las reglas del juego hemos sentido por vez primera el verdadero sentido de la montaña, que no es sino la proyección en nuestros recuerdos del reflejo de nuestros propios miedos; pues la montaña es un ecosistema inerte. Son los organismos que la habitan los que la dotan de vida y establecen las relaciones que dan forma a los diversos ecosistemas, siendo los pastores los que han modelado en sus faldas un ecosistema de pastizal. Mas son los montañeros populares y turistas los que han llevado a la montaña esa proyección de su modo de vida urbanizado, disfrazando la necesidad de espacios naturales en un intento exitoso de extender los parque urbanos más allá de los lindes de las ciudades. La montaña ha quedado acotada para el disfrute de las ciudades merced a una política decimonónica de reducir artificiosamente sus límites en aras de facilitar el acceso de todo el mundo a los rincones más inhóspitos del corazón de los macizos, enmascarando en falsas excusas de seguridad y progreso lo que no es sino un intento de acomodar las reglas de la montaña a una sociedad demandante de espacios naturales dotados de todos los servicios y facilidades de que goza la sociedad occidental. Un intento de volver hospitalario ese universo inerte ajeno a las intenciones especulativas del hombre, que busca sacar interés turístico de los grandes mitos del alpinismo, olvidando que esos mitos han surgido del sacrificio y del esfuerzo. La montaña es para el disfrute de todo el mundo, pero es la propia montaña la que ha de marcar las reglas del juego, y acotar a cada persona su ámbito de penetración en función de su preparación y capacidad de sacrificio.

 
Novedades

Si buscas casa en la zona de Llanes, no dejes de visitar asturhabitat.com
Recomendado: Fotografía aérea.
Recomendado:
Las mejores rutas por los Picos de Europa.


PORTADA | PERSONAL | CONTACTO ©   Sentido Común - 5 Sentidos